Cómo lograr buenos huevos cocidos

Aunque parezca increíble, hasta cocer un huevo tiene lo suyo.

¿Cuántas veces se rompe la cáscara y se sale la clara?

¿Cuántas veces se cuece de más el huevo y al partirlo la yema tiene una capa grisácea nada agradable?

¿Cuántas veces descascaramos el huevo y nos encontramos con que se coció demasiado y no logramos una buena apariencia, con la yema centrada y una buena recubierta de clara?

¿Cuántas veces es imposible pelar el huevo y al quitar la cáscara se va un pedazo de clara?

¿Cuántas veces queremos un huevo duro y nos sale el interior medio crudo?

O viceversa, ¿cuántas veces queremos que la yema salga cremosa y la clara bien cocida?

Bueno, aquí la técnica básica:

Tener los huevos a temperatura ambiente. Colocarlos en una olla pequeña para que al momento de hervir, no bailen demasiado, y por tanto, se rompan. 

Cubrir los huevos con agua al tiempo, de tal suerte que el líquido rebase el límite de los huevos por 1 ó 2 centímetros; agregar un buen puñado de sal fina y un chorrito de vinagre. Llevar a ebullición. 

Cuando suelte el hervor, bajar la intensidad de la flama, para que el burbujeo no mueva demasiado los huevos. Con una cuchara, mover los huevos suavemente para que la yema se centre. Empezar a contar aquí los 13-15 minutos.

Cuando pase este tiempo, vaciar el agua caliente y dar un choque de agua fría. Repetir el choque de agua fría 1 ó dos veces más. Sentiremos que los huevos no suben ya la temperatura del agua. Y finalmente, cascar los huevos adentro del agua fría y dejarlos reposar una buena media hora antes de pelar.

Me funciona bien pelar los huevos bajo un hilo de agua de la llave. La cáscara se despega con facilidad y quedan perfectos y relucientes*. 

Finalmente, si lo que deseo es rebanarlos, espero un rato más hasta que estén bien fríos para lograr rebanadas perfectas.

*Nota: Este video muestra otra técnica para pelar perfectamente y con facilidad los huevos cocidos.